No hay tags aún.
Luna con tus cuatro fases,
tú con tu cara de plata,
que me alumbrabas la noche
con las estrellas doradas,
hasta el día se hiciera,
y las sombras terminaran,
pero en un día muy triste,
que comtemplándote estaba,
la muerte tocó a mi puerta
sin darme tregua de nada,
en el fondo huí feliz,
pues mi alma a ti se acercaba,
por fin cerca a ti yo estoy,
sin preocuparme de nada.